Ezequiel, 36
34. La tierra desolada, donde el viandante no veía más que devastación, será cultivada de nuevo.
34. La tierra desolada, donde el viandante no veía más que devastación, será cultivada de nuevo.
“Sejam como pequenas abelhas espirituais, que levam para sua colméia apenas mel e cera. Que, por meio de sua conversa, sua casa seja repleta de docilidade, paz, concórdia, humildade e piedade!” São Padre Pio de Pietrelcina