39. En el vestíbulo del pórtico había dos mesas en cada un de los dos lados para degollar sobre ellas los holocaustos, los sacrificios por el pecado y los de reparación.





“No tumulto das paixões terrenas e das adversidades, surge a grande esperança da misericórdia inexorável de Deus. Corramos confiantes ao tribunal da penitência onde Ele, com ansiedade paterna, espera-nos a todo instante.” São Padre Pio de Pietrelcina