20. Con viva esperanza confío en que en nada seré defraudado, sino que con toda seguridad, como siempre, también ahora Jesucristo será glorificado en mi cuerpo, sea por la vida, sea por la muerte.





“Não se aflija a ponto de perder a paz interior. Reze com perseverança, com confiança, com calma e serenidade.” São Padre Pio de Pietrelcina