13. Profanó las colinas que había al oriente de Jerusalén y al sur del monte Olivete, y que Salomón, rey de Israel, había edificado a Astarté, ídolo repugnante de Moab, y a Camós, ídolo repugnante de los amonitas.





“Quanto maiores forem os dons, maior deve ser sua humildade, lembrando de que tudo lhe foi dado como empréstimo.” São Padre Pio de Pietrelcina