28. Jesús se volvió a ellas y les dijo: "Hijas de Jerusalén, no lloréis por mí; llorad por vosotras y por vuestros hijos,





“Quando Jesus vem a nós na santa comunhão, encontra alegria em Sua criatura. Por nossa parte, procuremos Nele a nossa alegria.” São Padre Pio de Pietrelcina