Salmos, 138
8. El Señor lo hará todo por mí. Señor, tu amor es eterno, no abandones la obra de tus manos.
8. El Señor lo hará todo por mí. Señor, tu amor es eterno, no abandones la obra de tus manos.
“Como Jesus, preparemo-nos a duas ascensões: uma ao Calvário e outra ao Céu. A ascensão ao Calvário, se não for alegre, deve ao menos ser resignada!” São Padre Pio de Pietrelcina