Apocalipsis, 10

4. Yo me preparaba a escribir lo que habían dicho los siete truenos, cuando una voz desde el cielo me dijo: «Guarda en secreto las palabras de los siete truenos, no escribas nada.»

Versets liés à Apocalipsis, 10:

Apocalipsis 10 trata con la visión de John de un ángel fuerte que bajaba del cielo con un libro abierto en su mano. El ángel coloca un pie en la tierra y otro sobre el mar y llora con una voz fuerte como un león rugiente. Luego, siete truenos emiten sus voces, pero a John se le prohíbe escribir lo que escuchó. Los cinco versos relacionados con los temas cubiertos en Apocalipsis 10 son:

Jeremías 25:30: "Y las profetizará todas estas palabras, y les dirá, el Señor del alto rugio, y le da su voz desde su hogar sagrado; se levantará fuertemente contra su vivienda; como los que pisan las uvas contra todos los residentes de la tierra ". Este versículo habla de que Dios ruge como un león, similar a lo que el ángel fuerte hace en Apocalipsis 10.

Ezequiel 2:9-10: "Entonces miré, y he aquí, una mano extendida a mí, y he aquí, había un rollo de libro. Y lo extendí delante de mí, y fue escrita por dentro y por fuera; fueron lamentadas por escrito, y suspiros y ais ". Este versículo describe un rollo de libro, similar al libro abierto que el ángel fuerte tiene en su mano en Apocalipsis 10.

Daniel 12:4: "Pero tú, Daniel, termina las palabras y sella el libro, hasta el momento del fin; muchos correrán de una parte a otra, y la ciencia se multiplicará". Este versículo habla sobre el sellado de un libro, similar a lo que hace el ángel fuerte con el libro abierto en su mano en Apocalipsis 10.

Salmo 29:3: "La voz del Señor se escucha en sus aguas; el dios del trueno de la gloria; el Señor está en las muchas aguas". Este versículo describe a Dios Thundering, similar a lo que el ángel fuerte hace en Apocalipsis 10.

Éxodo 19:18: "Y todo el Monte Sinaí fumó, porque el Señor había descendido sobre él sobre el fuego; y su humo se elevó como un humo de un horno, y toda la colina tembló mucho". Este versículo describe la tremenda montura, similar a la reacción de la tierra y el mar cuando el ángel fuerte les pone los pies en Apocalipsis 10.