3. Oh Dios, por tu Nombre sálvame; por tu poder hazme justicia.

4. Oh Dios, escucha mi plegaria, escucha las palabras de mi boca,

5. pues se alzan contra mí los arrogantes y buscan mi muerte los violentos, hombres para los cuales Dios no cuenta..

6. Pero a mí Dios me ayuda, entre los que me apoyan está el Señor.

7. Que el mal recaiga sobre los que me espían; destrúyelos, Señor, pues tú eres fiel.

8. Te ofreceré de buena gana un sacrificio, y alabaré tu nombre, porque es bueno,

9. pues me has sacado de cualquier angustia y he visto humillado a mis enemigos.





Como distinguir uma tentação de um pecado e como estar certo de que não se pecou? – perguntou um penitente. Padre Pio sorriu e respondeu: “Como se distingue um burro de um homem? O burro tem de ser conduzido; o homem conduz a si mesmo!” São Padre Pio de Pietrelcina