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Eligió hombres capaces de todo Israel y los puso al frente del pueblo como jefes de mil, de cien, de cincuenta y de diez. (Exodo 18, 25)
La Morada tendrá que ser hecha de diez cortinas de lino fino de color jacinto morado y rojo, adornadas con querubines. (Exodo 26, 1)
Por el lado del mar, esto es al oeste, lo ancho, unas cortinas de veinticinco metros marcarán su anchura; habrá diez columnas con otras tantas basas. (Exodo 27, 12)
Ante la entrada del atrio se pondrá una cortina de diez metros hecha de lino fino retorcido y bordado de color jacinto, púrpura y de grana dos veces teñida. Se sostendrá en cuatro columnas con otras tantas basas. (Exodo 27, 16)
Estuvo allí con Yavé por espacio de cuarenta días y cuarenta noches, sin comer ni tomar agua. Y escribió en las tablas las palabras de la Alianza, los diez mandamientos. (Exodo 34, 28)
Entonces los artesanos más expertos de entre los que ejecutaban el trabajo hicieron la Morada. Hicieron diez cortinas de lino fino retorcido de color jacinto, morado y rojo, adornadas con querubines. (Exodo 36, 8)
Además, en lo ancho del atrio que mira al oeste había cortinas por espacio de veinticinco metros, con diez columnas y otras tantas basas de bronce. (Exodo 38, 12)
Pero a la entrada del atrio se puso una cortina de diez metros de lino fino retorcido color morado, púrpura y de grana dos veces teñida: una obra de bordador. Tenía diez metros de largo y dos y medio de altura, como las cortinas del atrio. (Exodo 38, 18)
al llegar el día diez del séptimo mes, harás resonar el cuerno. Será entonces el día del Perdón, y harás resonar el cuerno en todo el país. (Levítico 25, 9)
Cinco de ustedes perseguirán a cien de ellos, y cien de ustedes a diez mil de ellos: los enemigos caerán ante ustedes a filo de espada. (Levítico 26, 8)
Yo les quitaré el pan, hasta el punto que diez mujeres cocerán todo su pan en un solo horno, y se lo darán tan medido que no se podrán saciar. (Levítico 26, 26)
De los cinco a los veinte años, el valor será: para el varón veinte siclos, para la mujer diez siclos. (Levítico 27, 5)