Trouvé 46 Résultats pour: Guibea

  • Desde allí fueron a Guibea y se encontraron con un grupo de profetas;lo invadió el espíritu de Dios y se puso a profetizar en medio de ellos. (1 Samuel 10, 10)

  • Después, despidió Samuel al pueblo, y cada cual se fue a su casa. También Saúl se fue a la suya, en Guibea, acompañado de aquellos valientes cuyos corazones había movido el Señor. (1 Samuel 10, 26)

  • Llegaron los mensajeros a Guibea, donde vivía Saúl, y contaron estas cosas al pueblo, y todos se pusieron a gritar y a llorar. (1 Samuel 11, 4)

  • Saúl eligió tres mil hombres de Israel, de los cuales dos mil estaban con él en Micmas y en los cerros de Betel, y mil con Jonatán en Guibea de Benjamín. En cuanto al resto del pueblo, lo devolvió a sus carpas. (1 Samuel 13, 2)

  • Jonatán dio muerte al gobernador filisteo de Guibea, lo que llegó a oídos de los filisteos. (1 Samuel 13, 3)

  • Con esto se retiró Samuel. El resto del pueblo que quedaba subió con Saúl a juntarse con los demás combatientes que había en Guibea. (1 Samuel 13, 15)

  • Saúl, su hijo Jonatán y su tropa habían establecido su campamento en Guibea de Benjamín, mientras que los filisteos acampaban en Micmas. Y salieron tres destacamentos de filisteos a devastar los campos; uno tomó el camino de Ofrá, en la comarca de Saúl; (1 Samuel 13, 17)

  • Este acampaba en las cercanías de Guibea, bajo el granado que está cerca de la era, y estaban con él unos seiscientos hombres. (1 Samuel 14, 2)

  • La primera mira al norte, frente a Micmas, y la segunda al sur, frente a Guibea. (1 Samuel 14, 5)

  • Los vigías de Saúl que estaban en Guibea de Benjamín vieron que la gente del campamento se dispersaba y se movía de un lado para otro. (1 Samuel 14, 16)

  • Después se retiró Samuel para Ramá, y Saúl a su casa en Guibea de Saúl. Samuel no vio más a Saúl hasta el día de su muerte. Y lloraba por él, porque Yavé se había arrepentido de haberlo hecho rey de Israel. (1 Samuel 15, 34)

  • Supo Saúl que David y los hombres que lo acompañaban habían sido descubiertos. Y estando Saúl en Guibea, en el alto, debajo del tamarisco, con la lanza en la mano, rodeado de todos sus oficiales, (1 Samuel 22, 6)


“Feliz a alma que atinge o nível de perfeição que Deus deseja!” São Padre Pio de Pietrelcina