Trouvé 51 Résultats pour: Leche

  • ¿Piensas que nos trajiste a una tierra que mana leche y miel? ¡Si ni siquiera nos has dado campos ni viñas! ¿Crees que toda esa gente está ciega? ¡No iremos, pues!" Moisés se enojó mucho y dijo a Yavé: "No mires su ofrenda, no les he quitado nada, ni siquiera un burro, ni les he hecho daño a ninguno de ellos". (Números 16, 14)

  • Escucha, pues, Israel, y cuida de poner en práctica lo que ha de traerte felicidad y prosperidad en esta tierra que mana leche y miel, como lo prometió Yavé, Dios de tus padres. (Deuteronomio 6, 3)

  • Y prolongarán sus días en el país que Yavé juró dar a sus padres y a su descendencia, tierra que mana leche y miel. (Deuteronomio 11, 9)

  • No comerán de ningún animal hallado muerto. Se lo darás al forastero que reside en tu ciudad o bien lo venderás a un extranjero, sabiendo que tú eres un pueblo consagrado a Yavé, tu Dios. No cocerás el cabrito en la leche de su madre. (Deuteronomio 14, 21)

  • Y nos trajo aquí para darnos esta tierra que mana leche y miel. (Deuteronomio 26, 9)

  • Desde tu santuario, desde lo alto de los cielos, mira a tu pueblo Israel y bendícelo, así como a la tierra que nos has dado según lo tenías dicho a nuestros padres, esta tierra que mana leche y miel.» (Deuteronomio 26, 15)

  • Y al pasar escribirás en ellas todas las palabras de esta Ley, con el fin de asegurar tu entrada a la tierra que Yavé, tu Dios, te da como lo tiene dicho a tus padres, tierra que mana leche y miel. (Deuteronomio 27, 3)

  • Pues los estoy llevando a la tierra que bajo mi juramento prometí a sus padres, tierra que mana leche y miel, y ellos, después de comer hasta saciarse y engordar bien, se volverán hacia otros dioses, les darán culto y a mí me despreciarán y romperán mi Alianza. (Deuteronomio 31, 20)

  • la crema de la vaca y la leche de las ovejas. la grasa de los corderos, y la flor de los granos de trigo. tuvo por bebida el jugo de la uva. (Deuteronomio 32, 14)

  • Pues los israelitas anduvieron cuarenta años por el desierto, hasta que murieron todos, toda esa generación que no obedeció a Yavé, y Yavé les juró que no los dejaría entrar a la tierra que mana leche y miel y que prometió a sus padres. (Josué 5, 6)

  • La mujer destapó el odre de la leche, le dio de beber y volvió a cubrirlo con una manta. (Jueces 4, 19)

  • El pidió agua, ella le dio leche; en la copa de honor le sirvió nata. (Jueces 5, 25)


“Deus nunca me recusou um pedido”. São Padre Pio de Pietrelcina