Trouvé 13 Résultats pour: Terminaba

  • Pusieron cordones de color morado en los bordes de la cortina que terminaba el primer conjunto, e hicieron lo mismo con los bordes de la cortina que terminaba el segundo conjunto. (Exodo 36, 11)

  • Aarón, levantando las manos hacia el pueblo, lo bendijo, y luego descendió, pues terminaba de ofrecer el sacrificio por el pecado, el holocausto y el sacrificio de comunión. (Levítico 9, 22)

  • Aún no terminaba de hablar, cuando la tierra se abrió a sus pies. (Números 16, 31)

  • Después, la frontera llegaba a la vertiente de Acarón, al norte, inclinándose hacia Sicarón y pasaba por el monte Bala, llegando a Jebnel. Así terminaba por el occidente en el mar Grande. (Josué 15, 11)

  • Desde Janoka bajaba hasta Astarot y Narata, pasaba por Jericó y terminaba en el Jordán. (Josué 16, 7)

  • Después, la frontera se dirigía desde Tafuaj hacia el oeste, hasta el Cana, y terminaba en el mar Grande. Tal fue la herencia de la tribu de los hijos de Efraím, distribuida en sus familias. (Josué 16, 8)

  • Esta era tan gruesa como un palo de telar, terminaba en una punta de hierro y pesaba siete kilos. Delante de él marchaba el que llevaba su escudo. (1 Samuel 17, 7)

  • Y, cuando terminaba el sacrificio, Jehú dio esta orden a los soldados y a su oficiales: «Entren y mátenlos a todos, que ninguno de ellos pueda escaparse.» Entraron, pues, y los pasaron a todos a filo de espada, llegando hasta el santuario de la Casa de Baal. (2 Reyes 10, 25)

  • Aún no terminaba de hablar, cuando entró un tercero, diciendo: «Los caldeos, divididos en tres grupos, se lanzaron sobre tus camellos, se los llevaron, dieron muerte a espada a tus mozos y sólo yo he escapado para anunciártelo.» (Job 1, 17)

  • Atardecía, terminaba el día, ya estaba encima la noche y la oscuridad. (Proverbios 7, 9)

  • El pueblo suplicaba al Señor Altísimo y se mantenía en oración delante del Misericordioso, hasta que se acababa el homenaje al Señor y se terminaba la liturgia. (Sirácides (Eclesiástico) 50, 19)

  • Pedro lo iba siguiendo de lejos, hasta llegar al palacio del sumo sacerdote. Entró en el patio y se sentó con los policías del Templo, para ver en qué terminaba todo. (Evangelio según San Mateo 26, 58)


“Não sejamos mesquinhos com Deus que tanto nos enriquece.” São Padre Pio de Pietrelcina