Trouvé 96 Résultats pour: amigo

  • De nuevo Pedro lo negó diciendo: «Amigo, no sé de qué hablas.» Todavía estaba hablando cuando un gallo cantó. (Evangelio según San Lucas 22, 60)

  • Es el novio quien tiene a la novia; el amigo del novio está a su lado y hace lo que él le dice y se alegra con sólo oír la voz del novio. Por eso me alegro sin reservas. (Evangelio según San Juan 3, 29)

  • Después les dijo: «Nuestro amigo Lázaro se ha dormido y voy a despertarlo.» (Evangelio según San Juan 11, 11)

  • Pilato todavía buscaba la manera de dejarlo en libertad. Pero los judíos gritaban: «Si lo dejas en libertad, no eres amigo del César; el que se proclama rey se rebela contra el César.» (Evangelio según San Juan 19, 12)

  • Por lo tanto, amigo mío, si eres capaz de juzgar, ya no tienes disculpa. Te condenas a ti mismo cuando juzgas a los demás, pues tú haces lo que estás condenando. (Carta a los Romanos 2, 1)

  • Pero, amigo, ¿quién eres tú para pedir cuentas a Dios? Acaso dirá la arcilla al que la modeló: ¿Por qué me hiciste así? (Carta a los Romanos 9, 20)

  • Saluden a Urbano, nuestro compañero de trabajo, y a mi querido amigo Estaquis. (Carta a los Romanos 16, 9)

  • No debe ser bebedor ni peleador, sino indulgente, amigo de la paz y desprendido del dinero. (1º Carta a Timoteo 3, 3)

  • Al contrario, que reciba con facilidad en su casa, que sea amigo del bien, hombre de buen juicio, justo, piadoso, dueño de sí mismo. (Carta a Tito 1, 8)

  • Esto es lo que recuerda la Escritura: Abrahán creyó en Dios, y por eso fue reconocido justo, y fue llamado amigo de Dios. (Carta de Santiago 2, 23)

  • ¡Adúlteros! ¿No saben que la amistad con este mundo es enemistad con Dios? Quien desee ser amigo del mundo se hace enemigo de Dios. (Carta de Santiago 4, 4)

  • Muy querido amigo, sabiendo que tu alma va por el buen camino, te deseo que goces de buena salud y que todos tus caminos te den satisfacción. (3º Carta de Juan 1, 2)


“Se precisamos ter paciência para suportar os defeitos dos outros, quanto mais ainda precisamos para tolerar nossos próprios defeitos!” São Padre Pio de Pietrelcina