Trouvé 48 Résultats pour: Arameos

  • Los arameos de Damasco acudieron en auxilio de Hadadézer, rey de Sobá, pero David derrotó a veintidós mil de esos arameos. (II Samuel 8, 5)

  • Luego puso gobernadores en Arám de Damasco, y los arameos pasaron a ser vasallos de David, sometidos a tributo. El Señor daba la victoria a David en todas sus campañas. (II Samuel 8, 6)

  • David adquirió gran renombre cuando volvió de derrotar a dieciocho mil arameos en el valle de la Sal. (II Samuel 8, 13)

  • Cuando los amonitas advirtieron que se habían atraído el odio de David, mandaron a contratar veinte mil soldados de los arameos de Bet Rejob y de los arameos de Sobá, al rey de Maacá con mil hombres, y a veinte mil hombres de la gente de Tob. (II Samuel 10, 6)

  • Los amonitas salieron y formaron en orden de batalla a la entrada de la Puerta, pero los arameos de Sobá y de Rejob, y la gente de Tob y de Maacá se mantuvieron aparte, en campo abierto. (II Samuel 10, 8)

  • Cuando Joab vio que había dos frentes de batalla, uno delante de él y otro detrás, seleccionó a lo más escogido de Israel y los alineó frente a los arameos, (II Samuel 10, 9)

  • y dijo: "Si los arameos son más fuertes que yo, tú vendrás en mi ayuda; y si los amonitas son más fuertes que tú, yo iré a auxiliarte. (II Samuel 10, 11)

  • Cuando los amonitas vieron que los arameos habían huido, también ellos huyeron delante de Abisai y entraron en la ciudad. Joab, por su parte, suspendió su campaña contra los amonitas y volvió a Jerusalén. (II Samuel 10, 14)

  • Los arameos, al ver que habían sido vencidos, concentraron sus tropas, (II Samuel 10, 15)

  • y Hadadézer envió mensajeros para movilizar a los arameos del otro lado del Río. Estos llegaron a Helám a las órdenes de Sobac, el jefe del ejército de Hadadézer. (II Samuel 10, 16)

  • Cuando informaron de esto a David, él concentró a todo Israel, cruzó el Jordán y llegó a Helám. Los arameos tomaron posiciones frente a David y le libraron batalla. (II Samuel 10, 17)

  • Pero tuvieron que huir delante de Israel, y David les mató a los arameos setecientos caballos y cuarenta mil hombres de caballería. También hirió a Sobac, el jefe del ejército, el cual murió allí mismo. (II Samuel 10, 18)


“Se precisamos ter paciência para suportar os defeitos dos outros, quanto mais ainda precisamos para tolerar nossos próprios defeitos!” São Padre Pio de Pietrelcina