Trouvé 271 Résultats pour: Babilonia

  • Porque ustedes dicen: "El Señor nos ha suscitado profetas en Babilonia", (Jeremías 29, 15)

  • así habla el Señor de los ejércitos, el Dios de Israel, acerca de Ajab, hijo de Colaías, y de Sedecías, hijo de Maasías, que profetizan para ustedes la mentira en mi Nombre: Yo los entrego en manos de Nabucodonosor, rey de Babilonia, que los herirá a la vista de ustedes. (Jeremías 29, 21)

  • Y ellos darán origen a una maldición que repetirán todos los deportados de Judá en Babilonia: "¡Que el Señor te trate como a Sedecías y como a Ajab, a quienes el rey de Babilonia hizo asar en el fuego!", (Jeremías 29, 22)

  • Porque él nos mandó decir a Babilonia: ‘Esto va para largo. Construyan casas, y habítenlas; planten huertas y coman sus frutos...’". (Jeremías 29, 28)

  • En ese entonces, el ejército del rey de Babilonia estaba asediando a Jerusalén, y el profeta Jeremías estaba preso en el patio de la guardia, en la casa del rey de Judá. (Jeremías 32, 2)

  • Allí lo había puesto preso Sedecías, porque profetizaba en estos términos: "Así habla el Señor: Miren que yo voy a entregar esta ciudad en manos del rey de Babilonia, y él la tomará; (Jeremías 32, 3)

  • Sedecías no escapará de las manos de los caldeos, sino que caerá en manos del rey de Babilonia: él le hablará cara a cara y lo verá con sus propios ojos; (Jeremías 32, 4)

  • Sedecías será llevado a Babilonia, y allí permanecerá hasta que yo me ocupe de él -oráculo del Señor-. Si ustedes combaten contra los caldeos, no conseguirán nada". (Jeremías 32, 5)

  • Por eso, así habla el Señor: Yo voy a entregar esta ciudad en manos de los caldeos y en manos de Nabucodonosor, rey de Babilonia, y él la tomará. (Jeremías 32, 28)

  • Y ahora, así habla el Señor, el Dios de Israel, a esta ciudad de la que ustedes dicen: "Va a caer en manos del rey de Babilonia, por la espada, el hambre y la peste". (Jeremías 32, 36)

  • Palabra que llegó a Jeremías de parte del Señor, mientras Nabucodonosor, rey de Babilonia, y todo su ejército, junto con todos los reinos de la tierra sometidos a su dominio y todos los pueblos, combatían contra Jerusalén y contra todas sus ciudades: (Jeremías 34, 1)

  • Así habla el Señor, el Dios de Israel: Ve a decir a Sedecías, rey de Judá: Así habla el Señor: Mira que yo voy a entregar esta ciudad en manos del rey de Babilonia, y él la incendiará. (Jeremías 34, 2)


“Pense na felicidade que está reservada para nós no Paraíso”. São Padre Pio de Pietrelcina