Trouvé 42 Résultats pour: Sacerdocio

  • Lo confirmó en el sumo sacerdocio y en todos los altos cargos que había tenido antes, y le dio un lugar preeminente entre sus principales Amigos. (I Macabeos 11, 27)

  • Entonces el joven Antíoco escribió a Jonatán, en estos términos: "Te confirmo en el sumo sacerdocio, te pongo al frente de los cuatro distritos y quiero que te cuentes entre los Amigos del rey". (I Macabeos 11, 57)

  • Por estos motivos, el rey Demetrio lo confirmó en el sumo sacerdocio (I Macabeos 14, 38)

  • Simón aceptó, y consintió en ejercer el sumo sacerdocio, en ser comandante y etnarca del Pueblo judío y de los sacerdotes, y en ponerse al frente de ellos". (I Macabeos 14, 47)

  • El Dios que salvó a todo su pueblo y concedió a todos la herencia, el reino, el sacerdocio y la santificación, (II Macabeos 2, 17)

  • Después que murió Seleuco y le sucedió en el trono Antíoco, llamado Epífanes, Jasón, hermano de Onías, usurpó fraudulentamente el sumo sacerdocio, (II Macabeos 4, 7)

  • Pero Menelao, una vez presentado ante el rey, lo impresionó con su aire majestuoso y logró hacerse investir del sumo sacerdocio, ofreciéndole trescientos talentos de plata más que Jasón. (II Macabeos 4, 24)

  • Así regresó provisto del mandato real, pero sin llevar consigo nada digno del sumo sacerdocio, sino más bien la furia de un cruel tirano y la violencia de una fiera salvaje. (II Macabeos 4, 25)

  • Menelao dejó como sustituto en el sumo sacerdocio a su hermano Lisímaco, y Sóstrates dejó a Crates, jefe de los chipriotas. (II Macabeos 4, 29)

  • Debido a eso, aunque he sido despojado de la dignidad heredada de mis antepasados -me refiero al sumo sacerdocio- he venido aquí, (II Macabeos 14, 7)

  • Lo estableció en virtud de un pacto irrevocable y le confirió el sacerdocio del pueblo. Lo atavió con espléndidos ornamentos y lo ciñó con una vestidura gloriosa. (Eclesiástico 45, 7)

  • Mi pueblo perece por falta de conocimiento. Porque tú has rechazado el conocimiento, yo te rechazaré de mi sacerdocio; porque has olvidado la instrucción de tu Dios, también yo me olvidaré de tus hijos. (Oseas 4, 6)


“Deus quer que as suas misérias sejam o trono da Sua misericórdia.” São Padre Pio de Pietrelcina