Trouvé 878 Résultats pour: cuarenta años en el desierto
Jonás comenzó a internarse en la ciudad y caminó durante todo un día, proclamando: "Dentro de cuarenta días, Nínive será destruida". (Jonás 3, 4)
¡Señor, yo he oído tu renombre! ¡He visto tu obra, Señor ! ¡En el curso de los años, hazla revivir, en el curso de los años, manifiéstala; pero en la conmoción, acuérdate de tener piedad! (Habacuc 3, 2)
Él extenderá su mano contra el Norte y hará desaparecer a Asiria; convertirá a Nínive en una desolación, en una tierra árida como el desierto. (Sofonías 2, 13)
Entonces el ángel del Señor dijo: "Señor de los ejércitos, ¿hasta cuándo esperarás para compadecerte de Jerusalén y de las ciudades de Judá, contra las cuales estás irritado desde hace setenta años?". (Zacarías 1, 12)
y preguntar a los sacerdotes de la Casa del Señor de los ejércitos y a los profetas: "¿Debo seguir llorando e imponiéndome privaciones en el quinto mes, como lo he hecho durante tantos años?". (Zacarías 7, 3)
Habla a todo el pueblo del país y a los sacerdotes, diciéndoles: Si ustedes han ayunado y se han lamentado en el quinto y el séptimo mes desde hace setenta años, ¿es por mí que han practicado esos ayunos? (Zacarías 7, 5)
Así habla el Señor de los ejércitos: Los ancianos y las ancianas se sentarán de nuevo en las plazas de Jerusalén, cada uno con su bastón en la mano, a causa de sus muchos años. (Zacarías 8, 4)
y aborrecí a Esaú. Yo hice de sus montañas una desolación y di su herencia a los chacales del desierto. (Malaquías 1, 3)
La ofrenda de Judá y de Jerusalén será agradable al Señor, como en los tiempos pasados, como en los primeros años. (Malaquías 3, 4)
Al verse engañado por los magos, Herodes se enfureció y mandó matar, en Belén y sus alrededores, a todos los niños menores de dos años, de acuerdo con la fecha que los magos le habían indicado. (Mateo 2, 16)
En aquel tiempo se presentó Juan el Bautista, proclamando en el desierto de Judea: (Mateo 3, 1)
A él se refería el profeta Isaías cuando dijo: Una voz grita en el desierto: Preparen el camino del Señor, allanen sus senderos. (Mateo 3, 3)