Trouvé 587 Résultats pour: Israelitas

  • Pues yo sustraigo a los israelitas, de sus sacrificios de comunión, el pecho mecido y la pierna reservada para dárselos al sacerdote Aarón y a sus hijos, por decreto perpetuo entre los israelitas. (Levítico 7, 34)

  • Esto mandó Yahveh que los israelitas les dieran el día en que los ungió, como decreto perpetuo de generación en generación. (Levítico 7, 36)

  • que Yahveh prescribió a Moisés en el monte Sinaí, el día en que mandó a los israelitas que presentaran sus ofrendas a Yahveh en el desierto del Sinaí. (Levítico 7, 38)

  • Hablarás a los israelitas, diciendo: "Tomad un macho cabrío para el sacrificio por el pecado y un becerro y un cordero, ambos de un año y sin defecto, para el holocausto; (Levítico 9, 3)

  • y enseñar a los israelitas todos los preceptos que Yahveh les ha dado por medio de Moisés. (Levítico 10, 11)

  • Tú, y contigo tus hijos y tus hijas, comeréis también en lugar puro el pecho mecido y la pierra reservada, porque os han sido dados como porción tuya y de tus hijos, de los sacrificios de comunión de los israelitas. (Levítico 10, 14)

  • Hablad a los israelitas y decidles: De entre todos los animales terrestres podréis comer estos: (Levítico 11, 2)

  • Habla a los israelitas y diles: Cuando una mujer conciba y tenga un hijo varón, quedará impura durante siete días; será impura como en el tiempo de sus reglas. (Levítico 12, 2)

  • Hablad a los israelitas y decidles: Cualquier hombre que padece flujo seminal es impuro a causa del flujo. (Levítico 15, 2)

  • Mantendréis alejados a los israelitas de sus impurezas para que no mueran a causa de ellas por contaminar mi Morada, la que está en medio de ellos. (Levítico 15, 31)

  • Recibirá de la comunidad de los israelitas dos machos cabríos para el holocausto. (Levítico 16, 5)

  • Así purificará el santuario de las impurezas de los israelitas y de sus rebeldías en todos sus pecados. Lo mismo hará con la Tienda del Encuentro que mora con ellos en medio de sus impurezas. (Levítico 16, 16)


“O santo silêncio nos permite ouvir mais claramente a voz de Deus”. São Padre Pio de Pietrelcina