Trouvé 161 Résultats pour: mandado

  • Moisés y el sacerdote Eleazar hicieron como había mandado Yahveh a Moisés. (Números 31, 31)

  • Tal como había mandado Yahveh a Moisés, así hicieron las hijas de Selofjad. (Números 36, 10)

  • El año cuarenta, el día uno del undécimo mes, habló Moisés a los israelitas exponiendo todo cuanto Yahveh la había mandado respecto a ellos. (Deuteronomio 1, 3)

  • Partimos del Horeb y fuimos por ese enorme y temible desierto que habéis visto, camino de la montaña de los amorreos, como Yahveh nuestro Dios nos había mandado, y llegamos a Cadés Barnea. (Deuteronomio 1, 19)

  • Vosotros me respondisteis: «Hemos pecado contra Yahveh nuestro Dios. Subiremos y combatiremos como Yahveh nuestro Dios nos ha mandado.» Ceñísteis cada uno vuestras armas y creísteis fácil subir a la montaña. (Deuteronomio 1, 41)

  • Luego nos volvimos y partimos hacia el desierto, por el camino del mar de Suf, como Yahveh me había mandado. Durante muchos días anduvimos rodeando la montaña de Seír. (Deuteronomio 2, 1)

  • Mira, como Yahveh mi Dios me ha mandado, yo os enseño preceptos y normas para que los pongáis en práctica en la tierra en la que vais a entrar para tomarla en posesión. (Deuteronomio 4, 5)

  • «Guardarás el día del sábado para santificarlo, como te lo ha mandado Yahveh tu Dios. (Deuteronomio 5, 12)

  • Recuerda que fuiste esclavo en el país de Egipto y que Yahveh tu Dios te sacó de allí con mano fuerte y tenso brazo; por eso Yahveh tu Dios te sacó de allí con mano fuerte y tenso brazo; por eso Yahveh tu Dios te ha mandado guardar el día del sábado. (Deuteronomio 5, 15)

  • Honra a tu padre y a tu madre, como te lo ha mandado Yahveh tu Dios, para que se prolonguen tus días y seas feliz en el suelo que Yahveh tu Dios te da. (Deuteronomio 5, 16)

  • Ciudad, pues, de proceder como Yahveh vuestro Dios os ha mandado. No os desviéis ni a derecha ni a izquierda. (Deuteronomio 5, 32)

  • Estos son los mandamientos, preceptos y normas que Yahveh vuestro Dios ha mandado enseñaros para que los pongáis en práctica en la tierra a la que vais a pasar para tomarla en posesión, (Deuteronomio 6, 1)


“O Anjo de Deus não nos abandona jamais.” São Padre Pio de Pietrelcina