Trouvé 80 Résultats pour: Tropas
Fortificó Cedrón, dejando allí tropas de infantería y caballería para hacer salidas y patrullar por los caminos conforme a las órdenes del rey. (I Macabeos 15, 41)
Juan, con sus tropas, acampó frente a los enemigos, y al notar que sus hombres tenían miedo de cruzar el torrente, lo cruzó él el primero; al verlo, sus hombres lo siguieron. (I Macabeos 16, 6)
Mandó también emisarios a Guézer con la orden de matar a Juan. Solicitó por carta de los comandantes de las tropas judías que se unieran a él, prometiéndoles plata, oro y regalos. (I Macabeos 16, 19)
Heliodoro, después de ofrecer un sacrificio al Señor y desear mucha prosperidad a aquel que le había concedido la vida, se despidió de Onías y se volvió con sus tropas a la corte del rey. (II Macabeos 3, 35)
Fue recibido espléndidamente por Jasón, y toda la ciudad le acompañó y recibió con antorchas y aclamaciones. Desde allí marchó con sus tropas a Fenicia. (II Macabeos 4, 22)
Lisímaco, ante las turbas sublevadas y ebrias de furor, armó tres mil hombres y comenzó a hostigar cruelmente al pueblo; las tropas estaban acaudilladas por un tal Tirano, avanzado en edad y en locura. (II Macabeos 4, 40)
El Macabeo reunió sus tropas, se puso al frente de ellas y pronto se hizo invencible frente a los gentiles, pues el Señor había cambiado su ira en misericordia. (II Macabeos 8, 5)
El Macabeo reunió sus tropas, unos seis mil hombres, y los exhortó a que no tuvieran miedo a los enemigos y que no les asustara la muchedumbre de gentiles que, contra toda justicia, venía contra ellos, (II Macabeos 8, 16)
Fue entonces cuando Gorgias, nombrado general de aquellas regiones, comenzó a reunir tropas mercenarias y a hostigar sin tregua a los judíos. (II Macabeos 10, 14)
Pero al amanecer del día quinto, veinte jóvenes de las tropas del Macabeo, encendidos de indignación por las blasfemias, se subieron valerosamente sobre la muralla y mataron a cuantos cayeron en sus manos. (II Macabeos 10, 35)
Dositeo y Sosípatro, jefes de las tropas del Macabeo, marcharon contra ella y aniquilaron la guarnición dejada por Timoteo, de más de diez mil hombres. (II Macabeos 12, 19)
Timoteo vino a caer en manos de las tropas de Dositeo y Sosípatro. Pedía con gran astucia que le perdonasen la vida, pues estaban en sus manos los padres y hermanos de muchos judíos, los cuales no serían perdonados si le mataban a él. (II Macabeos 12, 24)