Trouvé 108 Résultats pour: herencia

  • Porque al nacer, nacéis para maldición; y, al morir, la maldición será vuestra herencia. (Eclesiástico 41, 9)

  • de arreglar cuentas con el socio y compañero de viaje, o de hacer partición de herencia a los amigos; (Eclesiástico 42, 3)

  • Sus bienes pasan a su descendencia y su herencia de hijos a nietos. (Eclesiástico 44, 11)

  • Por eso Dios le prometió con juramento que todas las naciones serían bendecidas en su descendencia y que lo multiplicaría como el polvo de la tierra, exaltaría su linaje como las estrellas y le daría el país en herencia desde un mar a otro mar, desde el río hasta los extremos de la tierra. (Eclesiástico 44, 21)

  • le renovó la bendición de todos los hombres; e hizo reposar sobre la cabeza de Jacob su alianza, lo confirmó en sus bendiciones, le dio el país por herencia, la dividió en porciones y se las repartió a las doce tribus. (Eclesiástico 44, 23)

  • Pero en la tierra escogida no tuvo él herencia, ni parte en medio del pueblo, porque el Señor fue su porción y su herencia. (Eclesiástico 45, 22)

  • También hizo Dios un pacto con David, hijo de Jesé, de la tribu de Judá. La sucesión real pasa sólo a uno de sus hijos, mientras que la herencia de Aarón pasa a toda su posteridad. (Eclesiástico 45, 25)

  • Por eso le daré en herencia multitudes, y gente innumerable recibirá como botín, pues se entregó indefenso a la muerte y fue contado entre los malhechores, él, que llevaba los pecados de muchos e intercedía por los malhechores. (Isaías 53, 12)

  • En aquellos días irán de la mano la casa de Judá y la casa de Israel, y juntas vendrán del país del norte a la tierra que yo di en herencia a vuestros padres. (Jeremías 3, 18)

  • Alegraos, sí, saltad de gozo, saqueadores de mi herencia; brincad como becerros en el prado, como caballos relinchad. (Jeremías 50, 11)

  • "Hijo de hombre, los habitantes que quedan entre las ruinas, en la tierra de Israel, andan diciendo: Uno solo era Abrahán y obtuvo el país en herencia, mientras que nosotros somos muchos; a nosotros se nos ha dado el país en posesión. (Ezequiel 33, 24)

  • Por haber dicho: Las dos naciones, los dos países son míos; los poseeremos en herencia aunque esté allí el Señor, (Ezequiel 35, 10)


“Todas as graças que pedimos no nome de Jesus são concedidas pelo Pai eterno.” São Padre Pio de Pietrelcina