Trouvé 46 Résultats pour: rebaños

  • y toda la familia de su padre; solamente dejaron en la región de Gosen a sus niños y a sus rebaños y ganados. (Génesis 50, 8)

  • Los israelitas se llevaron prisioneras a las mujeres de los madianitas con sus niños; saquearon todos sus ganados, rebaños y riquezas. (Números 31, 9)

  • Los hijos de Rubén y los hijos de Gad tenían grandes y numerosos rebaños. Cuando vieron que la tierra de Yazer y la de Galaad eran lugares muy aptos para la ganadería, (Números 32, 1)

  • Nuestros niños, nuestras mujeres, nuestros rebaños y todos nuestros ganados quedarán aquí, en las ciudades de Galaad; (Números 32, 26)

  • solamente vuestras mujeres, vuestros niños y vuestros ganados -ya sé que vuestros rebaños son numerosos- se quedarán en las ciudades que os he dado (Deuteronomio 3, 19)

  • Bendito será el fruto de tus entrañas, el producto de tu suelo y los partos de tus vacas y rebaños. (Deuteronomio 28, 4)

  • Los hijos de José formaban dos tribus: Manasés y Efraín. No se dio parte alguna a los levitas en la tierra, sino solamente algunas ciudades para habitar, y pastos para sus ganados y rebaños. (Josué 14, 4)

  • Subían con sus rebaños y tiendas como una nube de langosta y lo destruían todo; sus camellos eran innumerables. (Jueces 6, 5)

  • Ellos se pusieron en marcha poniendo en cabeza a las mujeres, los niños, los rebaños y las cosas de valor. (Jueces 18, 21)

  • Os exigirá el diezmo de vuestros rebaños, y vosotros mismos seréis sus esclavos. (I Samuel 8, 17)

  • Los simeonitas, descritos más arriba nominalmente, vinieron en tiempo de Ezequías, rey de Judá, conquistaron sus campamentos y sus casas y las destruyeron totalmente hasta el día de hoy, y se establecieron en su lugar, pues allí había pastos para sus rebaños. (I Crónicas 4, 41)

  • Construyó depósitos para almacenar vino, trigo y aceite, establos para las distintas clases de ganado y apriscos para sus rebaños. (II Crónicas 32, 28)


“É difícil tornar-se santo. Difícil, mas não impossível. A estrada da perfeição é longa, tão longa quanto a vida de cada um. O consolo é o repouso no decorrer do caminho. Mas, apenas restauradas as forças, é necessário levantar-se rapidamente e retomar a viagem!” São Padre Pio de Pietrelcina