Habacuc, 3
13. Has salido para salvar a tu pueblo, para salvar a tu Ungido; has abatido el techo de la casa del impío, has descubierto sus cimientos hasta la roca. Pausa
13. Has salido para salvar a tu pueblo, para salvar a tu Ungido; has abatido el techo de la casa del impío, has descubierto sus cimientos hasta la roca. Pausa
“As almas! As almas! Se alguém soubesse o preço que custam”. São Padre Pio de Pietrelcina