27. Pero Absalón le insistió tanto, que David dejó partir con él a Amnón y a todos los hijos del rey. Absalón preparó un regio banquete,





“É doce o viver e o penar para trazer benefícios aos irmãos e para tantas almas que, vertiginosamente, desejam se justificar no mal, a despeito do Bem Supremo.” São Padre Pio de Pietrelcina