Jeremías, 52
8. Las tropas de los caldeos persiguieron al rey, y alcanzaron a Sedecías en las estepas de Jericó, donde se desbandó todo su ejército, dejándolo solo.
8. Las tropas de los caldeos persiguieron al rey, y alcanzaron a Sedecías en las estepas de Jericó, donde se desbandó todo su ejército, dejándolo solo.
“O Senhor se comunica conosco à medida que nos libertamos do nosso apego aos sentidos, que sacrificamos nossa vontade própria e que edificamos nossa vida na humildade.” São Padre Pio de Pietrelcina