6. Además presentará al Señor, en reparación por el pecado que cometió, una hembra del ganado menor -cordera o cabra- como sacrificio por el pecado; y el sacerdote practicará en favor de esa persona el rito de expiación por su pecado.





“As almas não são oferecidas como dom; compram-se. Vós ignorais quanto custaram a Jesus. É sempre com a mesma moeda que é preciso pagá-las”. São Padre Pio de Pietrelcina