4. a oídos de las autoridades y de los hijos del rey, a oídos de los ancianos, a oídos del pueblo entero desde el menor al mayor, de todos los que habitaban en Babilonia, a orillas del río Sud.





“Seja grato e beije docemente a mão de Deus. É sempre a mão de um pai que pune porque lhe quer bem” São Padre Pio de Pietrelcina