1. ¡Ay, los que bajan a Egipto por ayuda! En la caballería se apoyan, y fían en los carros porque abundan y en los jinetes porque son muchos; mas no han puesto su mirada en el Santo de Israel, ni a Yahveh han buscado.





O Pai celeste está sempre disposto a contentá-lo em tudo o que for para o seu bem”. São Padre Pio de Pietrelcina