10. Por eso mañana levántense antes del amanecer, y con todos los que vinieron contigo vayan al lugar que les he asignado. No guardes, pues, rencor en tu corazón, porque tú sabes que te estimo. Levántense, pues, muy temprano y partan apenas aclare.»





“Para consolar uma alma na sua dor, mostre-lhe todo o bem que ela ainda pode fazer.” São Padre Pio de Pietrelcina