24. Cuando los de Judá llegaron a la cumbre desde donde se divisa el desierto, vieron todo el campo cubierto de cadáveres sin que uno solo hubiera quedado con vida.





“É sempre necessário ir para a frente, nunca para trás, na vida espiritual. O barco que pára em vez de ir adiante é empurrado para trás pelo vento.” São Padre Pio de Pietrelcina