pronađen 281 Rezultati za: Importancia de la Alianza
y dijo: «Yavé, Dios de Israel, no hay Dios semejante a ti, ni en el cielo, ni en la tierra. Tú eres fiel a tu alianza y tienes compasión con tus siervos cuando te sirven con sinceridad. (1 Reyes 8, 23)
Entonces Yavé dijo a Salomón: «No has guardado mi Alianza, ni los preceptos que te había ordenado. Por esto te quitaré una parte de tu reino y se la daré a un servidor tuyo. (1 Reyes 11, 11)
Eliseo entonces abandonó los bueyes, corrió tras Elías y le dijo: «Déjame ir a abrazar a mi padre y a mi madre y te seguiré.» Respondió Elías: «Vuélvete, si quieres; era algo sin importancia.» (1 Reyes 19, 20)
Pero Yavé tuvo piedad y se compadeció de ellos, volviéndose propicio a ellos, a causa de la Alianza con Abraham, Isaac y Jacob, y no quiso destruirlos totalmente ni echarlos lejos de su rostro. (2 Reyes 13, 23)
Despreciaron sus decretos, la alianza que había pactado con sus padres y las advertencias que les había hecho. Fueron tras dioses vanos y se hicieron vanos ellos mismos, como las naciones que los rodeaban, a pesar de que Yavé había dicho: «No harán como ellos.» (2 Reyes 17, 15)
Yavé había hecho una alianza con ellos, ordenándoles: «No honren a otros dioses ni se postren ante ellos, ni les sirvan ni les ofrezcan sacrificios. (2 Reyes 17, 35)
No olviden la alianza que hice con ustedes y no adoren a dioses extranjeros, (2 Reyes 17, 38)
Esto les sucedió porque no escucharon la voz de Yavé, su Dios, y rompieron la Alianza, lo que Moisés, siervo de Yavé, había ordenado, y no lo escucharon ni lo practicaron. (2 Reyes 18, 12)
El rey estaba de pie junto a la columna; pactó la alianza en presencia de Yavé, comprometiéndose a seguirlo, a guardar sus mandamientos y sus leyes, y a respetar sus ordenanzas. Se comprometió a mantener esta alianza según lo escrito en el Libro, con todo su corazón y toda su alma. Y todo el pueblo se comprometió con él. (2 Reyes 23, 3)
El rey dio esta orden a todo el pueblo: «Celebren la Pascua en honor de Yavé, su Dios, según está escrito en este libro de la Alianza.» (2 Reyes 23, 21)
Así, pues, David, los ancianos de Israel y los jefes militares fueron a traer el Arca de la Alianza de Yavé, desde la casa de Obededom a Jerusalén con gran fiesta y alegría. (1 Crónicas 15, 25)
Cuando el Arca de la Alianza de Yavé entró en la ciudad de David, Micol, hija de Saúl, estaba mirando por una ventana; vio al rey David que saltaba y lo despreció en su corazón. (1 Crónicas 15, 29)