pronađen 50 Rezultati za: Monedas

  • Lo que entregó el resto del pueblo ascendía a 20.000 monedas de oro, 2.000 minas de plata y 67, túnicas sacerdotales. (Nehemías 7, 71)

  • Cada año, en adelante, daré para el mantenimiento del Templo quince mil monedas de plata, que se tomarán de los ingresos del rey en los lugares convenientes. (1 Macabeos 10, 40)

  • Remito, además, las cinco mil monedas de plata que cada año se cobraban de los tributos del Templo, y se las doy a los sacerdotes que están a cargo del culto. Todo aquel que por deudas con los impuestos reales o por cualquier otra deuda, (1 Macabeos 10, 42)

  • Los hombres de Simón, seducidos por la avaricia, se dejaron comprar a precio de plata por los de las torres y a cambio de sesenta mil monedas permitieron que escapara un cierto número de ellos. (2 Macabeos 10, 20)

  • Efectuó entre sus soldados una colecta y entonces envió hasta dos mil monedas de plata a Jerusalén a fin de que allí se ofreciera un sacrificio por el pecado. Todo esto lo hicieron muy bien inspirados por la creencia de la resurrección, (2 Macabeos 12, 43)

  • Aquel día todo lugar donde había mil parras, valoradas en mil monedas de plata, se cubrirá de zarzas y espinas. (Isaías 7, 23)

  • Recuperé, pues, a mi esposa, pagando por ella quince monedas de plata y una carga y media de cebada. (Oseas 3, 2)

  • Yo les dije: «Si ustedes quieren, páguenme mi salario; si no, quédense con él.» Y me dieron treinta monedas de plata. (Zacarías 11, 12)

  • Pero Yavé me ordenó: «Echa en los cofres del Templo ese precio tan alto en que ellos me han valorado.» Tomé las monedas y las deposité en la alcancía del Templo de Yavé. (Zacarías 11, 13)

  • No lleven oro, plata o monedas en el cinturón. (Evangelio según San Mateo 10, 9)

  • y para empezar, le trajeron a uno que le debía diez mil monedas de oro. (Evangelio según San Mateo 18, 24)

  • Pero apenas salió el empleado de la presencia del rey, se encontró con uno de sus compañeros que le debía cien monedas. Lo agarró del cuello y casi lo ahogaba, gritándole: «Págame lo que me debes.» (Evangelio según San Mateo 18, 28)


“Para que se preocupar com o caminho pelo qual Jesus quer que você chegue à pátria celeste – pelo deserto ou pelo campo – quando tanto por um como por outro se chegará da mesma forma à beatitude eterna?” São Padre Pio de Pietrelcina