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  • En cuanto al rey de Hay, Josué lo hizo colgar de un árbol hasta que el sol se pusiera. Entonces lo hizo descolgar. Lo tiraron a la entrada de la ciudad y levantaron sobre él un montón de piedras que se ve todavía hoy. (Josué 8, 29)

  • Temió mucho, porque Gabaón era una ciudad muy importante, una ciudad real mayor que Hay, y sus hombres eran muy valientes. (Josué 10, 2)

  • Yavé también le entregó esta ciudad con su rey y habitantes, que sufrieron la misma suerte de Libna. (Josué 10, 32)

  • En esta ciudad pasó a cuchillo a todos sus habitantes, consagrándolos en anatema. (Josué 11, 11)

  • Nadie quedó con vida, y en seguida quemaron la ciudad. Josué tomó todas las ciudades de estos reyes y a todos sus reyes y los consagró en anatema, según se lo había ordenado Moisés, servidor de Yavé. (Josué 11, 12)

  • ninguna ciudad hizo las paces con los israelitas, fuera de los jeveos de Gabaón, de manera que todas fueron conquistadas. (Josué 11, 19)

  • Sijón, rey de los amorreos, que habitaba en Jesbón. Reinaba desde Aroer, ciudad situada junto al torrente Arnón, y desde el medio del valle reinaba sobre la mitad de Galaad hasta el torrente Yaboc, que limita con el país de los hijos de Ammón; (Josué 12, 2)

  • desde Aroer, situada a orillas del Arnón, incluyendo la ciudad en medio del valle, hasta la llanura de Madaba y Dibón. (Josué 13, 9)

  • Jesebón y todos sus pueblos que están sobre la meseta: Dibón, Bamot-Baal y la ciudad de Baalmon, (Josué 13, 17)

  • Yazer y todas las ciudades de Galaad, con la mitad del país de los amonitas hasta Aroer, ciudad fronteriza con Rabba; (Josué 13, 25)

  • Mas a Caleb, hijo de Jefoné, dio Josué en posesión particular en medio de los hijos de Judá, como le había mandado Yavé, la ciudad de Cariat-Arbe (este Arbe era el padre de los enaceos). Hoy se llama Hebrón, (Josué 15, 13)

  • Otoniel, hijo de Quenaz, hermano menor de Caleb, tomó la ciudad; éste le dio por esposa a su hija Axa. (Josué 15, 17)


“Viva feliz. Sirva ao Senhor alegremente e com o espírito despreocupado.” São Padre Pio de Pietrelcina