pronađen 23 Rezultati za: hacerme/page/1

  • Ustedes quisieron hacerme daño, pero Dios quiso convertirlo en bien para que se realizara lo que hoy ven: conservar la vida de un pueblo numeroso. (Génesis 50, 20)

  • Fue entonces cuando les dije: 'No puedo hacerme cargo yo solo de todos ustedes. (Deuteronomio 1, 9)

  • Cuando vi que nadie venía a ayudarme, arriesgué la vida, marché contra los amonitas, y Yavé los entregó en mis manos. ¿Por qué, pues, han subido hoy contra mí para hacerme la guerra?» (Jueces 12, 3)

  • Me dijo: Déjame ir, por favor, porque se celebra un sacrificio de familia en nuestra ciudad y mi hermano me ha invitado. Si quieres, pues, hacerme un favor, permíteme dar una vuelta por allí para ver a mis hermanos. Por eso no ha venido a la mesa del rey.» (1 Samuel 20, 29)

  • David le respondió: «Yo danzaba en presencia de Yavé. Juro por él, que me prefirió a tu padre y a toda tu familia para hacerme jefe de Israel, su pueblo, que yo volveré a danzar delante de Yavé, (2 Samuel 6, 21)

  • Entonces el rey Salomón dijo: «Que Yavé me haga morir, si no es cierto que, al hacerme esta petición, Adonías se ha jugado la vida. (1 Reyes 2, 23)

  • Sin embargo, Yavé, el Dios de Israel, me ha elegido de entre toda la familia de mi padre, para que fuese rey de Israel para siempre. Pues escogió a la tribu de Judá para tener el mando y entre las familias de Judá a la de mi padre, y de entre los hijos de mi padre, me escogió a mí para hacerme rey de todo Israel. (1 Crónicas 28, 4)

  • Querían hacerme algún daño; pero les mandé a decir: «Estoy muy ocupado en un trabajo muy importante. No bajaré hacia donde ustedes se encuentran, porque se pararía el trabajo si lo dejara.» (Nehemías 6, 3)

  • Oigo todo el día palabras hirientes, no piensan más que en hacerme daño. (Salmos 56, 6)

  • confío en Dios y no temo más, ¿qué puede hacerme un hombre? (Salmos 56, 12)

  • Tú que me hiciste pasar tantas penas y miserias, volverás para hacerme revivir, y me harás subir de nuevo del abismo. (Salmos 71, 20)

  • Si el Señor está conmigo, no temo, ¿qué podrá hacerme el hombre? (Salmos 118, 6)


“A divina bondade não só não rejeita as almas arrependidas, como também vai em busca das almas teimosas”. São Padre Pio de Pietrelcina