pronađen 167 Rezultati za: aceite

  • ¡Montañas de Gelboé, que no caiga sobre ustedes rocío ni lluvia, ni se cubran de campos fructíferos! Porque allí fue mancillado el escudo de los héroes, el escudo de Saúl, ungido no con aceite, sino con sangre de heridos y grasas de guerreros. (II Samuel 1, 21)

  • El sacerdote tomó de la Carpa el cuerno de aceite y ungió a Salomón. Entonces sonó la trompeta y todo el pueblo exclamó: ¡Viva el rey Salomón! (I Reyes 1, 39)

  • y Salomón le dio a Jirám veinte mil barriles de trigo para la manutención de su casa, más veinte mil cántaros de aceite puro de oliva. Esto era lo que Salomón entregaba a Jirám anualmente. (I Reyes 5, 25)

  • Pero ella respondió: "¡Por la vida del Señor, tu Dios! No tengo pan cocido, sino sólo un puñado de harina en el tarro y un poco de aceite en el frasco. Apenas recoja un manojo de leña, entraré a preparar un pan para mí y para mi hijo; lo comeremos, y luego moriremos". (I Reyes 17, 12)

  • Porque así habla el Señor, el Dios de Israel: El tarro de harina no se agotará ni el frasco de aceite se vaciará, hasta el día en que el Señor haga llover sobre la superficie del suelo". (I Reyes 17, 14)

  • El tarro de harina no se agotó ni se vació el frasco de aceite, conforme a la palabra que había pronunciado el Señor por medio de Elías. (I Reyes 17, 16)

  • Eliseo le dijo: "¿Qué puedo hacer por ti? Dime qué tienes en tu casa". Ella le respondió: "Tu servidora no tiene en su casa nada más que un frasco de aceite". (II Reyes 4, 2)

  • Luego entra y enciérrate con tus hijos; echa el aceite en todos esos recipientes, y cuando estén llenos, colócalos aparte". (II Reyes 4, 4)

  • Cuando todos estuvieron llenos, ella dijo a su hijo: "Alcánzame otro recipiente". Pero él respondió: "Ya no quedan más". Entonces dejó de correr el aceite. (II Reyes 4, 6)

  • Ella fue a informar al hombre de Dios, y este le dijo: "Ve a vender el aceite y paga la deuda; después, tú y tus hijos podrán vivir con el resto". (II Reyes 4, 7)

  • El profeta Eliseo llamó a uno de la comunidad de profetas y le dijo: "Ajústate el cinturón, toma contigo este frasco de aceite y ve a Ramot de Galaad. (II Reyes 9, 1)

  • Toma entonces el frasco de aceite, derrámalo sobre su cabeza y di: Así habla el Señor: Yo te he ungido rey de Israel. Después, abre la puerta y escapa sin detenerte". (II Reyes 9, 3)


“O Santo Sacrifício da Missa é o sufrágio mais eficaz, que ultrapassa todas as orações, as boas obras e as penitências. Infalivelmente produz seu efeito para vantagem das almas por sua virtude própria e imediata.” São Padre Pio de Pietrelcina