pronađen 363 Rezultati za: desierto de Sinaí

  • Como uvas en el desierto, yo encontré a Israel; como una breva en la higuera, al comienzo de la estación, yo vi a sus padres. Pero, al llegar a Baal Peor, se consagraron a la Ignominia y se hicieron abominables como el objeto de su amor. (Oseas 9, 10)

  • Yo te conocí en el desierto, en la tierra de la aridez. (Oseas 13, 5)

  • Por más que Efraím prospere entre sus hermanos, llegará el viento del este, el soplo del Señor, que sube del desierto, y se agotará su fuente, se secará su manantial. Él despojará el tesoro de todos los objetos preciosos. (Oseas 13, 15)

  • Delante de él, el fuego devora, detrás de él, la llama consume. El país es como un jardín de Edén delante de él, detrás de él, un desierto desolado. ¡Nada se le escapa! (Joel 2, 3)

  • Egipto se convertirá en una desolación y Edóm en un desierto desolado, a causa de la violencia cometida contra las hijos de Judá, cuya sangre inocente derramaron en su país. (Joel 4, 19)

  • Y a ustedes, los hice subir del país de Egipto y los conduje cuarenta años por el desierto, para que tomaran en posesión el país del amorreo. (Amós 2, 10)

  • ¿Acaso ustedes me ofrecieron sacrificios y oblaciones en el desierto durante cuarenta años, casa de Israel? (Amós 5, 25)

  • Él extenderá su mano contra el Norte y hará desaparecer a Asiria; convertirá a Nínive en una desolación, en una tierra árida como el desierto. (Sofonías 2, 13)

  • y aborrecí a Esaú. Yo hice de sus montañas una desolación y di su herencia a los chacales del desierto. (Malaquías 1, 3)

  • En aquel tiempo se presentó Juan el Bautista, proclamando en el desierto de Judea: (Mateo 3, 1)

  • A él se refería el profeta Isaías cuando dijo: Una voz grita en el desierto: Preparen el camino del Señor, allanen sus senderos. (Mateo 3, 3)

  • Entonces Jesús fue llevado por el Espíritu al desierto, para ser tentado por el demonio. (Mateo 4, 1)


“Caminhe com alegria e com o coração o mais sincero e aberto que puder. E quando não conseguir manter esta santa alegria, ao menos não perca nunca o valor e a confiança em Deus.” São Padre Pio de Pietrelcina