pronađen 68 Rezultati za: Conocimiento

  • Por mi parte estoy persuadido, hermanos míos, en lo que a vosotros toca, de que también vosotros estáis llenos de buenas disposiciones, henchidos de todo conocimiento y capacitados también para amonestaros mutuamente. (Romanos 15, 14)

  • pues en él habéis sido enriquecidos en todo, en toda palabra y en todo conocimiento, (I Corintios 1, 5)

  • Mas no todos tienen este conocimiento. Pues algunos, acostumbrados hasta ahora al ídolo, comen la carne como sacrificada a los ídolos, y su conciencia, que es débil, se mancha. (I Corintios 8, 7)

  • En efecto, si alguien te ve a ti, que tienes conocimiento, sentado a la mesa en un templo de ídolos, ¿no se creerá autorizado por su conciencia, que es débil, a comer de lo sacrificado a los ídolos? (I Corintios 8, 10)

  • Y por tu conocimiento se pierde el débil: ¡el hermano por quien murió Cristo! (I Corintios 8, 11)

  • ¡Gracias sean dadas a Dios, que nos lleva siempre en su triunfo, en Cristo, y por nuestro medio difunde en todas partes el olor de su conocimiento! (II Corintios 2, 14)

  • Pues el mismo Dios que dijo: De las tinieblas brille la luz, ha hecho brillar la luz en nuestros corazones, para irradiar el conocimiento de la gloria de Dios que está en la faz de Cristo. (II Corintios 4, 6)

  • y toda altanería que se subleva contra el conocimiento de Dios y reducimos a cautiverio todo entendimiento para obediencia de Cristo. (II Corintios 10, 5)

  • cómo me fue comunicado por una revelación el conocimiento del Misterio, tal como brevemente acabo de exponeros. (Efesios 3, 3)

  • Según esto, leyéndolo podéis entender mi conocimiento del Misterio de Cristo; (Efesios 3, 4)

  • y conocer el amor de Cristo, que excede a todo conocimiento, para que os vayáis llenando hasta la total Plenitud de Dios. (Efesios 3, 19)

  • hasta que llegemos todos a la unidad de la fe y del conocimiento pleno del Hijo de Dios, al estado de hombre perfecto, a la madurez de la plenitud de Cristo. (Efesios 4, 13)


“Peçamos a São José o dom da perseverança até o final”. São Padre Pio de Pietrelcina