pronađen 430 Rezultati za: lista de naciones

  • ¡Alabad a Yahveh, todas las naciones, celebradle, pueblos todos! (Salmos 117, 1)

  • entonces se llenó de risa nuestra boca y nuestros labios de gritos de alegría. Entonces se decía entre las naciones: ¡Grandes cosas ha hecho Yahveh con éstos! (Salmos 126, 2)

  • Hirió a naciones en gran número, dio muerte a reyes poderosos, (Salmos 135, 10)

  • Los ídolos de las naciones, plata y oro, obra de manos de hombre (Salmos 135, 15)

  • para ejecutar venganza en las naciones, castigos en los pueblos, (Salmos 149, 7)

  • Acércate, pues, el primero y cumple la orden del rey, como la han cumplido todas las naciones, los notables de Judá y los que han quedado en Jerusalén. Entonces tú y tus hijos seréis contados entre los amigos del rey, y os veréis honrados, tú y tus hijos, con plata, oro y muchas dádivas.» (I Macabeos 2, 18)

  • Matatías contestó con fuerte voz: «Aunque todas las naciones que forman el imperio del rey le obedezcan hasta abandonar cada uno el culto de sus padres y acaten sus órdenes, (I Macabeos 2, 19)

  • Entonces reconocerán todas las naciones que hay quien rescata y salva a Israel.» (I Macabeos 4, 11)

  • El valiente Judas y sus hermanos alcanzaron gran honor ante todo Israel y todas las naciones a donde su nombre llegaba. (I Macabeos 5, 63)

  • El rey Demetrio, viendo que el país estaba en calma bajo su mando y que nada le ofrecía resistencia, licenció todas sus tropas mandando a cada uno a su lugar, excepto las tropas extranjeras que había reclutado en las islas de las naciones. Todas las tropas que había recibido de sus padres se enemistaron con él. (I Macabeos 11, 38)

  • Reúne a los nuestros dispersos, da libertad a los que están esclavizados entre las naciones, vuelve tus ojos a los despreciados y abominados, y conozcan los gentiles que tú eres nuestro Dios. (II Macabeos 1, 27)

  • Por este motivo no sólo los judíos sino también muchos de las demás naciones se indignaron y se irritaron por el injusto asesinato de aquel hombre. (II Macabeos 4, 35)


“Subamos sem nos cansarmos, sob a celeste vista do Salvador. Distanciemo-nos das afeições terrenas. Despojemo-nos do homem velho e vistamo-nos do homem novo. Aspiremos à felicidade que nos está reservada.” São Padre Pio de Pietrelcina