pronađen 344 Rezultati za: sacrificios en el templo

  • Depositaron sus armas en el templo de Astarté y colgaron su cuerpo de los muros de Bet San. (I Samuel 31, 10)

  • Metieron el arca de Yahveh y la colocaron en su sitio, en medio de la tienda que David había hecho levantar para ella y David ofreció holocaustos y sacrificios de comunión en presencia de Yahveh. (II Samuel 6, 17)

  • Cuando David hubo acabado de ofrecer los holocaustos y sacrificios de comunión, bendijo al pueblo en nombre de Yahveh Sebaot (II Samuel 6, 18)

  • Absalón mandó a buscar a su ciudad de Guiló a Ajitófel el guilonita, consejero de David, y lo tuvo consigo cuando ofrecía los sacrificios. Así la conjuración se fortalecía y los partidarios de Absalón iban aumentando. (II Samuel 15, 12)

  • Clamé a Yahveh en mi angustia, a mi Dios invoqué, y escuchó mi voz desde su templo, resonó mi llamada en sus oídos. (II Samuel 22, 7)

  • Levantó allí David un altar a Yahveh y ofreció holocaustos y sacrificios de comunión. Entonces Yahveh atendió a las súplicas en favor de la tierra y la peste se apartó de Israel. (II Samuel 24, 25)

  • Con todo, el pueblo ofrecía sacrificios en los altos, porque en aquellos días no había sido aún construida una casa para el Nombre de Yahveh. (I Reyes 3, 2)

  • Salomón amaba a Yahveh y andaba según los preceptos de David su padre, pero ofrecía sacrificios y quemaba incienso en los altos. (I Reyes 3, 3)

  • Fue el rey a Gabaón para ofrecer allí sacrificios, porque aquel es el alto principal. Salomón ofreció mil holocaustos en aquel altar. (I Reyes 3, 4)

  • Se despertó Salomón y era un sueño. Entró en Jerusalén y se puso delante del arca de la alianza del Señor; ofreció holocaustos y sacrificios de comunión y dio un banquete a todos sus servidores. (I Reyes 3, 15)

  • El rey, y todo Israel con él, ofrecieron sacrificios ante Yahveh. (I Reyes 8, 62)

  • Salomón sacrificó, como sacrificios de comunión que ofreció en sacrificio a Yahveh, 22.000 bueyes y 120.000 ovejas; así inauguraron la Casa de Yahveh el rey y todos los hijos de Israel. (I Reyes 8, 63)


“A divina bondade não só não rejeita as almas arrependidas, como também vai em busca das almas teimosas”. São Padre Pio de Pietrelcina