pronađen 97 Rezultati za: derrota de los amorreos
a Sijón, rey de los amorreos, porque es eterno su amor; (Salmos 136, 19)
que cunda en ellos el pánico, deshaz el orgullo que tienen en su poder, que se confundan con su derrota. (I Macabeos 4, 32)
Judas declaró entonces la guerra a los descendientes de Esaú en Idumea, en Acrabatene, porque asediaban a los israelitas. Les infligió una fuerte derrota, los humilló y se apoderó de su botín. (I Macabeos 5, 3)
Cuando el ejército de Timoteo supo que estaba allí el Macabeo, huyeron ante él; sufrieron una gran derrota, pues aquel día murieron unos ocho mil hombres. (I Macabeos 5, 34)
Grave derrota de los israelitas por no haber escuchado a Judas y a sus hermanos, creyéndose capaces de grandes hazañas. (I Macabeos 5, 61)
y cómo habían sometido a aquel país con prudencia y perseverancia, a pesar de ser un país lejano; cómo habían derrotado a los reyes que los habían atacado desde los confines de la tierra, infligiéndoles fuerte derrota, y cómo los demás les pagaban un tributo anual. (I Macabeos 8, 4)
Demetrio, al enterarse de la muerte de Nicanor y de la derrota de su ejército, decidió mandar a Judea otra vez a Báquides y Alcimo como jefes del ala derecha de su ejército. (I Macabeos 9, 1)
Los del ala izquierda, viendo la derrota del ala derecha, siguieron por la espalda a Judas y a los suyos. (I Macabeos 9, 16)
Entonces Jasón hizo una matanza sin compasión en sus propios conciudadanos, olvidándose de que las victorias contra los de su propia nación son la mayor derrota; parecía que él no triunfaba de sus conciudadanos, sino de sus enemigos. (II Macabeos 5, 6)
Lisias, que era hombre cuerdo, meditando su derrota y viendo que los hebreos eran invencibles, ya que tenían por aliado al mismo Dios omnipotente, (II Macabeos 11, 13)
Aquel día tus ciudades quedarán desiertas como las de los heveos y amorreos, que fueron abandonadas ante los israelitas; se convertirán en un desierto. (Isaías 17, 9)
Conocen las naciones tu derrota, la tierra está llena de tus gritos. El guerrero tropieza con el guerrero, caen los dos a la vez. (Jeremías 46, 12)