pronađen 411 Rezultati za: derrota de los reyes amorreos

  • Y os dije: Yo soy el Señor, vuestro Dios. No adoraréis a los dioses de los amorreos cuyas tierras vais a ocupar. Pero vosotros no me habéis obedecido". (Jueces 6, 10)

  • Entonces dijo a la gente de Sucot: "Dad, por favor, tortas de pan a la gente que me sigue, porque están extenuados, y yo quiero continuar persiguiendo a Zébaj y a Salmuná, reyes madianitas". (Jueces 8, 5)

  • Zébaj y Salmuná huyeron; pero Gedeón los persiguió, e hizo prisioneros a los dos reyes de Madián, Zébaj y Salmuná, y derrotó a todo su ejército. (Jueces 8, 12)

  • El peso de los anillos de oro que él había pedido ascendió a veinte kilos, sin contar las lunetas, los pendientes y los vestidos de púrpura que llevaban los reyes madianitas ni los collares que colgaban del cuello de sus camellos. (Jueces 8, 26)

  • El Señor respondió: "Cuando los egipcios y los amorreos, los amonitas y los filisteos, (Jueces 10, 11)

  • Israel envió entonces mensajeros a Sijón, rey de los amorreos, rey de Jesbón, pidiéndole que le dejara pasar por su tierra hasta llegar a su destino. (Jueces 11, 19)

  • El Señor, Dios de Israel, entregó a Sijón y a todo su pueblo en manos de Israel, que los derrotó; e Israel se apoderó de todo el país de los amorreos que vivían en aquella región, (Jueces 11, 21)

  • y así ocupó todo el término de los amorreos desde el Arnón hasta el Yaboc y desde el desierto hasta el Jordán. (Jueces 11, 22)

  • Y si el Señor, Dios de Israel, expulsó a los amorreos ante su pueblo, Israel, ¿quieres tú ahora quitarle su posesión? (Jueces 11, 23)

  • Los derrotó desde Aroer hasta Minit, veinte ciudades, y hasta Abel Keramín. Fue una gran derrota, y los israelitas dominaron a los amonitas. (Jueces 11, 33)

  • Los filisteos se lanzaron al ataque y derrotaron a los israelitas, que huyeron a la desbandada. Fue una gran derrota. Cayeron treinta mil hombres de la infantería israelita, (I Samuel 4, 10)

  • El mensajero contestó: "Israel ha huido ante los filisteos; ha sido una gran derrota; murieron también tus dos hijos, Jofní y Fineés, y el arca de Dios fue capturada". (I Samuel 4, 17)


“As almas! As almas! Se alguém soubesse o preço que custam”. São Padre Pio de Pietrelcina