3. Al cabo de siete años, la mujer volvió del país de los filisteos, y fue a reclamar al rey su casa y su campo.





“Que o Espírito Santo guie a sua inteligência, faça-o descobrir a verdade escondida na Sagrada Escritura e inflame a sua vontade para praticá-la.” São Padre Pio de Pietrelcina