13. Mientras Josué estaba cerca de Jericó, alzó los ojos y vio a un hombre que estaba de pie frente a él, con la espada desenvainada en su mano. Josué avanzó hacia él y le preguntó: "¿Eres de los nuestros o de nuestros enemigos?".





O Pai celeste está sempre disposto a contentá-lo em tudo o que for para o seu bem”. São Padre Pio de Pietrelcina