Proverbios, 10
3. El Señor no deja que el justo sufra hambre, pero rechaza la avidez de los malvados.
3. El Señor no deja que el justo sufra hambre, pero rechaza la avidez de los malvados.
“Quando a videira se separa da estaca que a sustenta, cai, e ao ficar na terra apodrece com todos os cachos que possui. Alerta, portanto, o demônio não dorme!” São Padre Pio de Pietrelcina