Salmos, 96
8. aclamen la gloria del nombre del Señor. Entren en sus atrios trayendo una ofrenda,
8. aclamen la gloria del nombre del Señor. Entren en sus atrios trayendo una ofrenda,
“Não abandone sua alma à tentação, diz o Espírito Santo, já que a alegria do coração é a vida da alma e uma fonte inexaurível de santidade.” São Padre Pio de Pietrelcina