19. Hicieron otros dos anillos de oro, que pusieron en las dos puntas inferiores del pectoral, en el borde interior que queda junto al efod.





“Queira o dulcíssimo Jesus conservar-nos na Sua graça e dar-nos a felicidade de sermos admitidos, quando Ele quiser, no eterno convívio…” São Padre Pio de Pietrelcina