22. Faraón le contestó: «¿Qué te falta estando a mi lado para que quieras irte a tu tierra?» El respondió: «Nada, pero déjame partir.» Así, pues, Hadad llegó a ser un adversario: reinaba en Edom y odiaba a Israel.





“Pense na felicidade que está reservada para nós no Paraíso”. São Padre Pio de Pietrelcina