7. Puso sobre Aarón la túnica y se la ajustó con el cinturón, luego lo vistió con el manto; le puso encima el «Efod» y se lo ajustó con el cinturón del Efod.





“A divina bondade não só não rejeita as almas arrependidas, como também vai em busca das almas teimosas”. São Padre Pio de Pietrelcina