Talált 450 Eredmények: Jefes

  • Mientras los jefes de las ciudades de los filisteos iban delante, al frente de sus tropas, divididas en compañías de ciento y de mil, David y sus hombres marchaban a la retaguardia con Aquís. (1 Samuel 29, 2)

  • Los jefes de los filisteos dijeron: «¿Qué hacen aquí estos hebreos?» Aquís les respondió: «Es David, el servidor de Saúl, rey de Israel, que hace ya uno o dos años que está conmigo, y desde el día de su venida hasta hoy no he tenido nada que reprocharle.» (1 Samuel 29, 3)

  • Pero los jefes de los filisteos se enojaron con él y le dijeron: «Despide a ese hombre y que regrese al lugar que le señalaste. Que no vaya al combate con nosotros, no sea que durante la lucha se vuelva en contra nuestra. Pues ¿qué mejor ocasión que ésta para que él recupere la amistad de su amo, presentándole las cabezas de nuestros hombres? (1 Samuel 29, 4)

  • Aquís llamó a David y le dijo: «Yavé sabe que tú eres leal y me hubiera gustado que me acompañaras en esta campaña, pues desde el día que viniste a mí hasta el día de hoy nada malo he hallado en ti; pero los jefes no te miran bien. (1 Samuel 29, 6)

  • Por eso, vuélvete en paz, para no molestar a los jefes de los filisteos.» (1 Samuel 29, 7)

  • Aquís respondió: «Sabes muy bien que tú eres para mí como un ángel de Dios; pero los jefes de los filisteos no quieren que vayas a combatir con ellos. (1 Samuel 29, 9)

  • Llegó David a Siquelag y envió parte del botín a los jefes locales de Judá, parientes suyos, diciendo: «Reciban este presente de lo que hemos tomado de los enemigos de Yavé.» (1 Samuel 30, 26)

  • El hijo de Saúl tenía dos jefes de tropas, uno llamado Baamá, y el otro Recab. Eran hijos de Rimón de Beerot, benjaminitas, pues también Beerot era contada entre las ciudades de Benjamín. (2 Samuel 4, 2)

  • los jefes dijeron a Ja nún, su señor: «¿Crees que David te ha enviado condolencias por consideración a tu padre? ¿No será más bien a fin de explorar la ciudad, cono cer sus defensas y más tarde destruirnos, por lo que David te ha enviado sus servidores?» (2 Samuel 10, 3)

  • David pasó revista a su ejército y puso a la cabeza jefes de mil y de cien. Luego lo dividió en tres cuerpos. (2 Samuel 18, 1)

  • El rey ordenó a Joab, a Abisaí y a Itaí lo siguiente: «Por el amor que me tienen, traten bien a Absalón.» Y todo el ejército supo que el rey había dado esta orden a los jefes. (2 Samuel 18, 5)

  • Pero la orden de David prevaleció sobre los consejos de Joab y de los jefes del ejército, y ellos tuvieron que partir para hacer el censo de la población de Israel. (2 Samuel 24, 4)


“Como é belo esperar!” São Padre Pio de Pietrelcina