Talált 67 Eredmények: Sentencia

  • Pero yo cambiaré la suerte de Moab, en el futuro, dice Yavé. Hasta aquí la sentencia contra Moab. (Jeremías 48, 47)

  • El rey estará de duelo, colmado de espanto,a los nobles les temblarán las manos;los trataré de acuerdo a su comportamiento, tendrán la sentencia que se mereceny sabrán que yo soy Yavé. (Ezequiel 7, 27)

  • Te aplicaré la sentencia de las mujeres adúlteras y criminales; te entregaré a la cólera y a la indignación. (Ezequiel 16, 38)

  • Actuaron con justicia los que les aplicaron la sentencia que conviene a las mujeres adúlteras, la condenación reservada a las que derraman sangre. ¡Porque realmente son adúlteras y tienen sangre en sus manos! (Ezequiel 23, 45)

  • Una vez promulgada esta sentencia de muerte contra los sabios, buscaron también a Daniel y sus compañeros para matarlos. (Daniel 2, 13)

  • Has llevado a efecto una sentencia justa al traer el mal sobre nosotros y sobre Jerusalén, la Ciudad Santa de nuestros padres. Has obrado conforme a la verdad y la justicia, para castigo de nuestros pecados (Daniel 3, 28)

  • Todos los males que has traído sobre nosotros, todo lo que nos has hecho, lo has hecho conforme a tu justa sentencia (Daniel 3, 31)

  • Es la sentencia dictada por los ángeles, la cuestión decidida por los santos para que todo ser viviente sepa que el Altísimo está más arriba que cualquier autoridad humana; él da el poder a quien le agrada y exalta al más humilde de los hombres (Daniel 4, 14)

  • Y Daniel contestó: «Verdaderamente te has condenado con esta mentira, pues ya el ángel de Dios ha recibido de él la sentencia y viene a partirte por medio. (Daniel 13, 55)

  • Escuchen esto, sacerdotes; estén atentos, jefes de Israel; presten atención los de la casa del rey, pues esta sentencia es para ustedes: Han sido como un lazo de cazador en Mispá y como una red tendida en el Tabor. Yo los voy a castigar a todos porque se han hundido hasta el cuello en la corrupción. (Oseas 5, 1)

  • Por eso les envié profetas para desarraigarlos, y de mi propia boca salió su sentencia de muerte. (Oseas 6, 5)

  • Dejen que hablen, y que juren en falso, y que celebren convenios, pues su sentencia está lista para florecer, como hace la hierba mala entre los surcos de los sembrados. (Oseas 10, 4)


“Como é belo esperar!” São Padre Pio de Pietrelcina